El Power Walking, ideal para practicar en verano, es un deporte que viene de la caminata rápida y de la marcha atlética, su técnica se basa en el control de la postura. Si bien es un deporte menos exigente, una de sus ventajas es que las articulaciones sufren un menor desgaste.
- Facilita la quema de grasas.
- Reduce el riesgo de contraer enfermedades coronarias.
- Fortalece y flexibiliza las articulaciones.
- Libera dopamina y serotonina.
Para practicarlo, debes prestar atención a la postura corporal, los intervalos de ritmo y la respiración. Se puede practicar a cualquier edad porque cada persona puede adaptar su práctica a sus características personales: a pesar de comenzar de forma gradual, lo que se debe tener en cuenta, es que el paso debe ser enérgico, a una velocidad de 7 kms por hora durante un tiempo superior a 45 minutos para que sea realmente efectivo. Si saldrás a practicarlo este fin de semana, ten en mente estas consideraciones:
- Camina contrayendo el abdomen para proteger la zona lumbar
- En momentos de mayor intensidad, tus brazos deben llegar a 90º para ayudarte en el impulso
- Al andar se debe levantar un poco la punta del pie para evitar cambiar la forma de pisar cuando se está cansado, ya que esto podría causar lesiones.
- Elonga antes y después de la práctica, ya que nuestro cuerpo debe estar despierto para recibir la práctica.
- Si eres muy novato/a, prueba con una sesión de 20 minutos, que son los recomendados por la OMS para comenzar este hábito deportivo, cuidando el ritmo, resistencia y postura.
- Usa protección UV
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